viernes, 8 de marzo de 2024

Marzo "alante"

 

Verde y revuelta la mar:

espumas de un blanco sucio,

vienen encrespadas olas

que, en un crescendo especial,

van agrandando el rumor

que, como dicen algunos,

encierran las caracolas.

 

Antes que despunte el día,

ráfagas de viento frías

le dan aires teatrales

al jardín, a los cristales

del porche, en esta jornada.

 

De pasada,

instalado en el sillón,

contemplativo y absorto,

me envuelve la ceremonia

del último emperador

de China o de Babilonia.

 

Luego va saliendo el sol

acariciando las ramas

amarillas de mimosas.

La rutina familiar,

doméstica, de las cosas

regresa con el café.

-Hipocampo…

-Ya lo sé.  

lunes, 4 de marzo de 2024

Dune 2

 

no es una fase de una urbanización ni un edificio de oficinas, sino la fantasía extrema que se ha estrenado bajo tal título y que se caracteriza principalmente por su desmesura. Ya desde el sonido, formidable incluso para desgastados oídos de veteranos, se acumulan con premeditación las dimensiones del espectáculo. Y, metidos en harina, y en arena, pueden señalarse algunos aspectos que, por cierto, son frecuentes y comunes en el cine de ahora.

Si nos atenemos al título, ha debido precederlo una primera entrega de estas dunas, aunque es dudoso que quienes la conozcan se deslíen mucho mejor en ese laberinto de nomenclaturas bizarras, arbitrarias y caprichosas que designan una confusión de personajes, territorios y planetas ficticios, dinastías, linajes y ejércitos, etc. que requerirían un manual o al menos un cuadro sinóptico, un organigrama empresarial, para facilitar la digestión. Y como todo está inventado, se recurre a dejarse remolcar, buscando la inspiración en trillados fanatismos revolucionarios con mesías incluido; en evocaciones deudoras de las gladiadoras luchas del coliseo romano, cuyo diseño alcanza aquí cotas de delirio que Hitler y Speer se habrían quedado cortos para soñar; en máquinas de guerra que “pa qué” y en unos deliciosos “autogiros” (el arcaísmo es mío) a modo de maléficas libélulas gigantescas. En vestuarios algo galácticos y en conflictos de poder elementales entre quienes parecen los buenos y los malos.

No se prescinde tampoco, claro, de pinceladitas de bobo romance de “selfi” para adolescentes blanditos, faltos del último hervor.

En fin, que la “peli” les ha quedado primorosa y grandiosa pero, si escarbamos un poco, no se va a encontrar mucho asunto al fondo. Y queda en el aire una sugerida, anunciada, tercera parte que prevemos (que lleva sólo dos letras E, ¿vale?) heroica y épica también.

A ver si no me la pierdo.    

domingo, 25 de febrero de 2024

Una mera hipótesis

 

Sólo por si se diera la posibilidad, la ocasión.

Si cesare el consentimiento en un instante delicado del trámite, que podría ser cualquiera, puesto que es un elemento decisivo e inapelable, según se anda proclamando; si, a la sazón, la escena y la relación estuvieren discurriendo ya plenamente en la fase digamos introductora, con lo comprometido del detalle…, ¿podría por ventura equivaler tal repentina decisión a un unilateral coitus interruptus?

Y de ser así, ¿cómo evaluarlo con indiscutible certidumbre, cómo no comparar esa inasible cuestión con el libro vertiginoso de infinitas páginas que elucubraba Borges en uno de sus laberintos?

¿A qué portales cósmicos de filigrana se verán abocados los abogados laboriosos, los altos magistrados de las sucesivas instancias, que han de fallar los pleitos en cualquiera que sea la dirección?

viernes, 23 de febrero de 2024

"Only for your eyes"

 

La inclusión sabia, oportuna mejor que otra cosa, de la póstuma canción que los sobrevivientes Beatles han estrenado y editado poco ha, no es el detalle de menor encanto que implica el film “Argylle” y, de paso, pilla desprevenido al espectador, llevándolo de la mano a una inesperada emoción, a un sentimiento de post-nostalgia que claramente impregna esa melodía, muy a propósito para calar hondo.

También hay un gato que parece un búho, y que viaja en una mochila que se da aires de burbuja/casco de astronauta; hay una verdadera orgía de imágenes fantásticas y preciosos decorados y secuencias de exageración inverosímil para construir un lujoso ejercicio de diseño y arropar la breve y siempre valiosa intervención de Samuel L. Jackson, el profesionalismo expresivo de Sam Rockwell y la placidez sonriente de la orondita Bryce protagonista que, como en indirecto espejo XL, evoca y remite al (qué pena, tan corto) transitorio personaje inicial a cargo de Dua Lipa, Lagrange deliciosa, en su vestido dorado, de Versace, deslumbrante de seducción y belleza…

 

“Argylle” pone en la cocktelera esos y otros ingredientes para ofrecer un espectáculo extraordinario (con pirotecnias contundentes que ni tan siquiera las últimas entregas de Craig/Bond, las sofisticadas sastrerías de Kingsman o los largos tiroteos de Keanu/Wick han igualado todavía) en el que lo enrevesado y algo confuso del argumento pasa a ser secuela consecuente y trivial de las “pelis” de espías, agentes secretos, etc.

Un gustazo para tus ojos.   

jueves, 22 de febrero de 2024

El "domesticado" servicio doméstico de Perro

 

Con la chulería y el desentendimiento de costumbre, los ministros de turno (dispensadores superfluos de presupuestos manirrotos, con tanta “competencia” delegada en las autonomías) sólo -el acento ortográfico, nenes- se destacan por su actitud sumisa y de peloteo comparsa, hasta disolverse en la propia irrelevancia y las vergonzosas complicidades, agarrados con firmeza de percebes correosos a sus pingües sueldos, prebendas, emolumentos.

Así que no es novedad que sigan sin solución válida las justísimas reclamaciones de los agricultores, ganaderos, guardias civiles y el largo etcétera cuyas consecuencias a todos nos afectan.

Les debemos nuestro respaldo; procede la solidaridad sin fisuras con estas personas que absolutamente son NUESTRAS.

Y cabría preguntarse por qué los escasos incidentes y conductas aisladas que han desafinado en ese concierto, lo han hecho al parecer y sólo -el acento, nenes- con los emisarios de la Sexta.                   

martes, 20 de febrero de 2024

Un calvario

 

Vagando en un desolado desierto de abandono e incomprensión, sometidos a un desdén lacerante que casi nos reduce a ilusa casta de parias, nos agota el fracaso sistemático de cuantas gestiones emprendemos, que pudieran mitigar esta frustración permanente.

Los ínclitos fabricantes, los sátrapas del diseño y demás cómplices dolosos de esa cicatería, han resuelto desde hace ya demasiados años que el cuello universal de las camisas, con menudas oscilaciones, sea breve, ridículo, aventado al vacío metafísico (como para políticos al uso) con unas dimensiones infantiles que pretenden implantar, ínfulas de moda única, esa infame, alienadora e impuesta estética de mediocres usurpadores.

El nudo de la corbata (esa prenda emblemática, crucial para la coquetería masculina) queda así obligatoriamente expuesto a una intemperie descorazonadora, a un vértigo injusto que lo condena a no sentirse enmarcado como debiera, a naufragar en una orfandad lamentable.

Lejos en el tiempo permanecen, y olvidados con insolente desprecio, los cuellos de pala larga y ángulo agudo que arropaban con elegancia natural la corbata varonil.

Incluso los falaces “camiseros a medida” del ramo, que todavía se autoproclaman tales, carecen de los cumplidos moldes para el cuello que los haría dignos de nuestra consideración, y solapadamente aspiran a darnos sucedáneos incompetentes, parcos y lacónicos gatos por liebre que no convencen a los más románticos caballeros supervivientes.

Y no cuela.                   

lunes, 19 de febrero de 2024

Cine: "Ferrari"

 

Mis “blogs” se espacian ahora, se vuelven casi mensajes en la botella que un náufrago echa a la mar, sin apenas propósito ni destinatario previsible.

Hoy consulté la cartelera de las salas de “Las Salinas” (cines en Chiclana de la Frontera), y seleccioné un “film” de cuyo estreno había estado pendiente. Incluso curioseé por encima las críticas que presuntos especialistas del ramo, aventureros temerarios, habían emitido sobre él.

Nada se debe esperar del juicio, del “olímpico desdén” con el que suelen impregnar estos demiurgos sus opiniones, siempre veleidosas de exigencia y caprichos, cuando por sistema ponen el listón alto para el trabajo de los que realmente hacen cine, en tanto ellos ofician de oráculos/parásitos 2.0, retratándose así como estragados y melindrosos espectadores, como “entendidos” que más que nada buscan notoriedad con látigo de fariseos.

No hay que hacerles caso. La película “Ferrari” es un bocado satisfactorio para comensales de buena boca; y no digamos para los devotos del motor de combustión y sus derivados. El estruendo de los bólidos enardece, la peripecia personal, más o menos rigurosa en lo biográfico que sea, entretiene, Penélope borda su papel de fiera italiana, discípula de Ana Magnani y todavía queda sitio para hermosos paisajes y largas carreteras que se abren entre clásicas hileras de árboles, herederas de una belleza que siempre (los italianos son gente listísima) nos va a evocar la nostalgia del Imperio, sus mármoles y sus glorias.           

Se puede tener corazón de Ferrari, a pesar del color rojo.    

miércoles, 31 de enero de 2024

"Milady"

 

Según lo previsto, y como segunda parte anunciada de su predecesora, nos estrenan esta cinta que prosigue con las variaciones, fieles o caprichosas que sean del texto original, que continúan dando de sí las andanzas de los mosqueteros y demás personajes que escribiera Alejandro Dumas en su famosa novela.

Y no desmerece en absoluto: realización, fotografía, música, vestuario verosímil (como en la anterior), localizaciones y efectos sonoros, muy bien resueltos. Hasta la colección de armas y más aún, de los caballos elegidos para la ocasión, subrayan el empeño que sus artífices se han esmerado en poner, al ofrecernos esta versión, dicen que orgullosamente francesa.

Más interesantes en su cometido los actores que ofician del trio (Athos, Porthos, Aramis) que el que hace, un poco soso, de D’Artagnan; muy correctos, los que encarnan al cardenal y los reyes, etc.

Y la Green, cuya elección para el papel de Milady seguramente era inmejorable. Esta actriz, dueña de una mirada paralizante, traslada con propiedad todo el peligro que cabe atribuirle a sus manejos de espía en este espectacular asunto, imprimiendo a sus gestos tan sabia amalgama de cólera, ferocidad y perversión que no hay más que pedir.

Quizá el probable éxito -incluso de taquilla- de esta producción sea el tentador motivo para que, al final, la peripecia se atreva a entreabrir una eventual tercera entrega que corre el riesgo de empachar, de puro reiterativa. ¿Lo considerarán?  

jueves, 25 de enero de 2024

Cuando nos vendieron

 

los aires de saludable cambio que, muerto el Generalísimo, esperábamos como agua de mayo, con ansia ilusionada, el periódico llamado “El País” sacó pecho y alardeaba de que iba a ser la alternativa moderna (¡!) que convenía a los tiempos que, con la inaugurada democracia (¡!), empezábamos a construir, a vivir y a explorar.

Como el refrán (dime de lo que presumes, etc.), los sucesivos meandros de su recorrido han puesto sobradamente de relieve cuánto tenía de farol aquella tremolante, y luego descompuesta, oriflama.

Descendiendo por una escala de pringue y arrodillada sumisión, ya hace años que parece casi nada más que el estentóreo y vulgar altavoz del circo de feriantes cuyo remolino de detritus agita el aprendiz de brujo.

Un reguero deleznable de arbitrariedades sectarias caracteriza al “País”. Ni única ni última, ahí tenéis la expulsión (con hipócrita vestidura de rescisión contractual) de Fernando Savater, con la que esa suerte residual de panfleto acredita de nuevo su vocación de “gastrobar” hortera: ínfulas y oropel.  

sábado, 20 de enero de 2024

Así es, Don Carlos

 

Si nos dejamos tentar un poco por la retórica, o por mejor decir, por un glorioso énfasis en los términos, cabe seguramente calificar de “gesta” el triunfo que (¡por cuarta vez, nada menos!) acaba de obtener Carlos Sáinz en la prueba del DAKAR.

A mí, que tengo planteado un contencioso particular con la arena, me parece de mucho mérito que este piloto -considerablemente de edad ya madura, aunque sea un mozo todavía, si lo observo desde mis años- nos demuestre el vigor, la preparación, el ánimo indesmayable y las demás facultades o virtudes que le asisten para un pulso tan descomunal con las gigantescas y problemáticas dunas de carácter profesional que se le oponen en esa competición y que, avezado luchador, consigue dominar.

Arrostrando incomodidades sin cuento y plantando firme cara a semejante, peligroso palizón, a este hombre, a este ejemplo para conductores deportivos del automóvil, debemos nuestra admiración y nuestra enhorabuena.

Así es, Don Carlos.                

viernes, 19 de enero de 2024

El temporal de este enero

 

Infinitos instantes que vivimos, entendemos sucesivos (casi imperceptibles porque suele faltarnos la reflexión sobre su realidad) nos construyen el Tiempo que transcurre. (Es preferible escribir transcurre que escribir fluye, que puede quedar cursi, más pasado de moda que el miriñaque.)

Y por más que se han formulado teorías acerca de que, operando en “universos alternativos”, existen “tiempos” simultáneos, éstos parecen de problemática explicación, no digamos ya demostración válida o suficiente.

Desgajados así tales instantes, el misterio que asoma de inmediato puede ser su imposible cuenta, y más, su incierta y azarosa interrupción en la vida de cada uno: por sorpresa, no de verdad inesperado, que ya sabemos lo que hay, pero con el estilo que dramáticamente llamaríamos “a traición”, ¿cuál es el instante que va a señalarnos el descarte personal que se nos reserva? ¿Podría suceder, por ejemplo, entre dos gestos cotidianos, triviales, como abrir la ventana para ventilar la cocina y encender una lámpara?

Subdivididos los instantes hasta lo vertiginoso, hasta lo inverosímil, ¿puede haber un final en la fracción de instante que impensablemente se da para que el espejo nos devuelva la imagen que acabamos de ofrecerle al colocarnos delante de él?

 

-¿Y esto se te ocurre porque, sentado en el sillón del porche, andas mirando cómo agita el viento los árboles de enfrente?

-Supongo.              

miércoles, 17 de enero de 2024

Ya sé que ando desaparecido

 

Desde luego, resuelto -como me propuse meses atrás- a no mirar en lo posible las porquerías que la casta política incesantemente perpetra con pretextos ideológicos de índole variada y casi siempre inservibles. Desde luego, enclaustrado en parte mientras el ruido y las boberías rutinarias y reiteradas de los ritos navideños y del cambio de almanaques han vuelto a aturdirnos.

Hastiado de los “convenientes” embotamientos y socaliñas, de los anzuelos y las doctrinas con que nos/os van manipulando; básicamente, harto.

Por si a alguien le interesa, esta os ofrezco a modo de explicación y cortés excusa.

 

Atracones de lectura, un par de incursiones por las agotadas salas de proyección (“El rapto”, “El protector”). Poco más que comentar, atónito con las barbaridades y las horteradas que nutren los espacios de televisión.

¿A nadie le suena a trampa programada? ¿A desgaste deliberado, a gota a gota (malaya) de la más cutre y pérfida anestesia?

¿Hay que seguir tal cual, cómplices acobardados del engaño?

martes, 2 de enero de 2024

¿Empresarios arbitrarios?

 

No contento con subir de modo permanente “los precios galopantes de sus cosas” (el zumo de naranja con pulpa va camino de ser un inalcanzable elixir), el señor Roig, con modales de autócrata redomado, ha dado orden de retirar de las estanterías de sus supermercados los productos típicos de navidad, mantecados y así.

No imagino dónde puede haber leído esta criatura que el 2 de enero es ya una fecha impropia para que los aficionados insistamos en esas delicias favoritas de nuestra tradición. Y desluce mucho esa vitola, esa aureola que le anduvieron poniendo cuando la pandemia, de casi benefactor público, siendo en realidad y solamente un mercader más, un empresario más, a lo suyo.

Su habilidad como hombre de negocios está fuera de duda. Como también que un inversor de lo que sea pretende ganar dinero. Eso es así. Y no cabe entenderlo de otra forma; ni caben las protestas demagogas, hipocritonas que tan a menudo se formulan, si admitimos esta “democrática” libertad de precios de este tramposo estado del bienestar, que vaya tela. Porque la libre y salvaje especulación, que es otra manera de no llamar al pan, pan, etc. malamente ayuda a que tengamos un feliz año nuevo, pichones.       

martes, 26 de diciembre de 2023

Un caliente batir de palmas

 

Motivaciones frecuentes, y a menudo justas, son en el cante la queja, la protesta, la reivindicación.

Con notas de valentía, de desafío puesto en razón; con sentidos instrumentos de cuerda que en tonalidad menor subrayan esas melancolías; con un contagioso y caliente batir de palmas; desdoblada en cantaora y guitarrista que, para más afirmarse, ha decidido que la hablada cadencia andaluza prevalezca sobre la ortografía en su apellido (Peláe), esta María muestra, en uno de esos “youtubes” del internete, cómo se planta cara y se habla claro, con arte y empuje, templando y mandando, reiterando ese estribillo guapo que nos lo dice todo: “Que vengan a por mí”.

Que a todos debiera aludirnos. Bravo, brava María.

lunes, 25 de diciembre de 2023

Antonio:

 

Claro que me extrañaba que tus leales y cotidianos “likes” hubieran desaparecido, lo que no era propio de tu voluntaria fidelidad y tu generosa cortesía con este “blog”.

Llegué a achacarlo a mis recientes deserciones como redactor, deriva que reconozco desorientadora y que entiendo ocasionada por un relativo cansancio (que lo dan la edad y los visos de que uno habla, escribe, en el desierto).

Y no era tal: hoy me llega la noticia de ese infarto, repentino y a traición (así son las cosas) que ha cancelado tu vida.

 

A tu hermano, a tu gente hago llegar desde aquí el sentimiento de una amistad que estaba pendiente de un encuentro personal y que ahora nos es ya negada.

domingo, 24 de diciembre de 2023

La cuestión capilar, al filo de la nochebuena

 

De entre las diferentes coqueterías que lo comprometieron y cuyo discreto disimulo obtuvo fracasos considerables, no es la menor la observancia (semilitúrgica) del pelo.

Fue atreviéndose a dejarlo crecer, amparado en los ejemplos que, como todos los de su generación, recibieran de una “nouvelle vague” francesa que pronto cedería su liderazgo al empuje estético/social que, actitudes incluidas, supusieron los jóvenes músicos ingleses y americanos del norte (del norte de Méjico y el sur de Canadá, situémonos).

Ayudó a ello la comprensión materna y la aceptación “a regañadientes en disminución” que la paciencia paterna concedió a tal símbolo de independencia en los criterios, a esa señal de rebeldía con minúsculas en su caso, que en los jóvenes se iba extendiendo en los 60 del XX. Pero de antes, ya andaba marcado por la fantasía y la estética heroica y convencional de los mosqueteros de Dumas, favoritos en la lista de sus mitos y lecturas.

En este año último, cuyos artificiales y tumultuosos fastos navideños vuelve a rehuir, un corte drástico e inédito, aventurero y temerario casi, y la posterior revisión de Maritere han arribado a una distribución capilar que matiza con notable éxito el desgaste inevitable, proporcionando un estilo entre Christopher Walken y Donald Sutherland, un corte, un aire, que deberá salvaguardar, en orden a los deseables equilibrios emocionales, que tan frágil consistencia vienen mostrando.      

viernes, 8 de diciembre de 2023

Un Napoleón que no sé qué decirte

 

-¿Y a Vuesa Merced no le parece que el “Napoleón” de Ridley se ha quedado en poco?

-Puede ser. Claro es que no presumiendo de especialistas ni mucho menos de críticos “enterados” (que son la peste), éstas serían meras opiniones de meros espectadores.

-Eso sí, aficionados con todas las letras.

-Y las músicas. Pero las expectativas levantadas por ese “film” eran altas y cabía tenerlas con los antecedentes de ese director. Y algo defraudadas sí que se han visto.

-Formalmente, pocos reproches queremos hacerle; pero no se entiende bien la escasa profundidad que se concede al carácter, a la psicología de tan relevantes personajes. Si no es que la intención era desacreditarlos como al descuido, dando alguna pinceladita más a sus inseguridades y vulgares torpezas, que debieron tenerlas, que a su empuje e innegable importancia histórica.

-Será por eso que Phoenix parece desperdiciado/desdibujado como actor, y eso que lo es, bien demostrado.

-¿En fin?

-Largometraje, y prueba para las asentaderas de los cinéfilos, que esperamos de Scott una posterior compensación. El talento, nadie lo pone en duda.

-¿Algo para terminar?

-María Antonieta en la guillotina. La plebe, siempre lo es, que embaucada, escarnece con desquite soez y derriba reyes para ir a peor con los que “buenos los harán”, casi siempre déspotas también aunque mucho más ordinarios.

-¡Guay!

sábado, 2 de diciembre de 2023

Continuación

 

-¿Y piensan que al paciente,

lego y profano y por demás sufriente,

la información del impreso que ayer

por aquí se glosaba

le resulta precisa, suficiente?

-¿Pues qué detalles, para Vuesa Merced,

servirían acaso de mejora?

-La mención del azúcar y la sal

que escandalosamente brilla por su ausencia;

el suponer con temeraria guasa

y discutible ciencia

que omitirá el paciente la mostaza

en la dieta ordenada; que el tabasco

así mismo continuará en su frasco

cual si fuese el peor de los venenos…

-Desconcertado estáis, no es para menos…

-Y ¿qué es eso de los “Líquidos claros”

que, en cambio, expresamente se autorizan?

¿Son agua de colonia, vino blanco?

¡Pardiez, que no es asunto que dé risa

impreso tan ambiguo y cojitranco!

viernes, 1 de diciembre de 2023

Desacuerdos

 

Como cualquier observador medianamente atento ya sabe, la RAE experimenta brotes ocasionales de bobaliconería, crisis de identidad y otras alteraciones del pulso, que la inducen a conceder carta de naturaleza a según qué expresiones y “palabros” que, en oleadas, nos invaden nuestra hermosa Lengua Española.

Algunos casos de esta decadencia poco perdonable (que tiene ribetes de pretensión “progre” de flexibilidad superflua y mal entendidas inclusiones “tolerantes”) llenan de rubor a las piedras.

Y claro es que si la Institución se desdora y da tan erráticos ejemplos, el impreso que debería orientarnos en la pre-colonoscopia resulta sobremanera contradictorio en su redacción, con una sintaxis confusa y difusa que, en suma, añade alarma a lo que será desarrollo del pintoresco trance.

Desde estas líneas azarosas, de cuya infinitesimal y aun improbable influencia este modestísimo autor es harto consciente, queremos empero alzar una al menos corchea de desacuerdo con tal proceder y con casi todo lo demás que acontece en estos tiempos de barbarie y tontería predominantes.

sábado, 11 de noviembre de 2023

Correspondencia

 

Personas memoriosas y corteses

felicitáronme en el día de ayer;

y mostrar hoy mis agradecimientos

cumplimiento es, gustoso, del deber.

 

Con la que está cayendo

en este que es de lágrimas un valle,

no es menos que estupendo

tan voluntario y modoso detalle

como esas criaturas han tenido.

 

¿Qué cumpla muchos más? Ya lo veremos

y el tiempo lo dirá. Mientras, oremos.

viernes, 3 de noviembre de 2023

Desde la otra vida

 

Ya está “colgada” en el internete. No cabía esperar otra cosa, en estos tiempos de urgencias y ansiosas, atropelladas faltas de respeto, incluso cuando pretenden explicarse como consecuencia de la idolatría que sea.

Lo más que aporta este ejemplo de doliente melancolía es la creciente certidumbre de que el genio/genio, si queremos conceder a los 4 esa condición, fue, cada vez más claro, Lennon.

Por su afilado humor, por sus respuestas ingeniosas y chispeantes durante las entrevistas, por sus guiños mímicos en escena; por su independiente manera de desgajarse -cuando aquello se echaba a perder por el desgaste, las derivas individuales, la práctica imposibilidad de superar el propio listón del cuarteto- del fenómeno global y arrasador que provocaron (tomen nota los patéticos y fantasmones “revolucionarios” de mierda al uso) y con el que acaso se dieron en los morros. Por su valiente insatisfacción y el inconformismo en el que se debatía el gran tímido o inseguro, lo han asegurado de él, que fue.

Comparada con el 99% de su deslumbrante repertorio histórico, “Now and then” es una canción menor, tardía y que desatará con seguridad nuevas controversias entre los incondicionales sin límite y los seguidores que mantienen una fidelidad sin apasionamientos. La salvarán, en todo caso, la siempre sugerente entonación de John, su personalísimo timbre de voz que cuesta trabajo confundir; su sello, por encima de los otros tres. Su incuestionable encanto.  

martes, 31 de octubre de 2023

Rubia y guapa y con los ojos azules

 

O sea que muy buena estampa. Y si las noticias que de ti se difunden son verdaderas, y lo visible de tu comportamiento también parece acreditarlo, buena chica, responsable y formal con los estudios y con la losa gigantesca que te va a caer -ya te está cayendo- encima.

Porque así a bulto, la lectura fácil y boba, o intencionada, es la de los privilegios heredados en la cuna dinástica y bla, bla, bla. Pero cuando bien podrías permitirte esquivar la tarea que te espera, vas y la asumes: ponerte, cuando toque y si la cosa da de sí, al frente de este país revoltoso, algo irreflexivo e inconsecuente, que se deja amansar y distraer con esto y aquello, y se adormece en la fiesta y los “puentes”, siendo además presa propicia al envenenamiento y a la rastrera aspereza que sin ir más lejos, hoy, y para hacerse notar, han vuelto a enarbolar esos groseros energúmenos, esos cerdos de la política, beneficiados del chollo aunque ingratos remisos para la educación y el respeto que te deben por lo que simbolizas.

El horizonte pinta jodido, niña Leonor. Que Dios te reparta, como a los toreros, suerte. A todos va a hacernos falta.

domingo, 29 de octubre de 2023

Preguntando

 

Porque tan gran distancia es engañosa

parece lento tu desplazamiento:

redonda y luminosa,

prestigiosa de magias y de cuentos.

 

Ahí enfrente te veo,

en tu cadencia astral ensimismada,

musa quimérica, gentil trofeo

de poetas, de brujas y de hadas.

 

También fui yo, en las noches venturosas

y los amaneceres lisonjeros

-en una góndola de vino y rosas-

uno más de tus fans y tus remeros.

 

De aquello emite sombras burladoras

este ánimo cansado, “de diseño”.

Casi noviembre ya. ¿Cambiar la hora

de los relojes es cambiar los sueños?

 

Ya me dirás, Luna.

jueves, 26 de octubre de 2023

Precedida de altas expectativas,

 

como corresponde al lustroso e ilustre plantel de sus participantes, “Los asesinos de la luna”, sala llena, concentración considerable y necesaria, actitud respetuosamente seria, claro que íbamos a ir a verla.

Y vale que es el peliculón que cabía esperar, esmaltado con la maestría que esos veteranos -De Niro, Di Caprio, Scorsese, luces indiscutibles de un cine americano curiosamente, coincidentemente plagado de gentes con raíces más o menos italianas- que lo manejan a su sabio antojo de experimentados artistas de lo suyo y profesionales a más no poder.

Impresionante de viejas estampas (auténticas o no que sean) documentando una época y unos aconteceres que, de nuevo, retratan las tensiones y las pasiones que caracterizan, y lastran, el comportamiento de esta especie conflictiva que “semos”.

Los nombrados líneas atrás afirman sus relieves, o se calcan a sí mismos, con justo fundamento. Y sería atrevimiento enmendarles la plana. Sólo que las posaderas del espectador agradecerían el detalle -posible- de una posible y razonable disminución de ese metraje XXL al que es tan aficionado Scorsese.               

sábado, 21 de octubre de 2023

De la curiosidad a la decepción

 

Anoche, por TV2, emitieron “Belle de jour”, con todas las alharacas que se suelen conceder a las “vacas sagradas” y a sus “obras cumbre”.

Tan de su “etapa francesa” es la “peli” que, en los créditos, nuestros gloriosos vecinos del otro lado de los Pirineos no consideraron necesaria la tilde o virgulilla sobre la eñe del apellido Buñuel.

Y en fin, ahí estaba el Hipocampo en el sofá, resuelto a verla (a la “peli” me refiero) de nuevo, 56 años después de cuando en Santa Fe de Bogotá, donde ya entonces no había censura.

Casual muestrario de lo que parecen obsesiones y morbos del director aragonés, el film no ha resistido el paso implacable del Tiempo: y queda, a estas alturas de lo vivido y de lo ocurrido, casi inocentón/ridículo, discontinuo, tocado de ese caprichoso surrealismo gratuito que algo efímero fue y tan pasado de moda asoma, a base de personajes artificiales y cuadros superpuestos, con no siempre lograda ambición de rompedores, digan lo que digan los sesudos apologistas invitados por el programa.

Ni, aunque apuntaba, la joven Deneuve había madurado todavía lo que luego ha sido su permanente, deslumbrante, casi intocable hermosura que ahora cumple 80 añitos, vaya.               

jueves, 19 de octubre de 2023

Ya os lo dije

 

El desajuste es que ya, en este tiempo echado a perder, con los ánimos acorazados contra la sensibilidad, el cine inteligente, elegante, impecable de forma, dialogado, al que la maestría y el talento de Woody nos convoca una y otra vez, corre el albur de resultar natural, incluso tocado de ternura, que son por lo que parece valores a la baja.

Hermosa de localizaciones, clásica y guapa de fotografía, con música de jazz al fondo (la afición, que no se pierda) y con un argumento y unos personajes desarrollados con sabios resortes que condonan lo que tiene de convencional, la última de Mr. Allen, “Golpe de suerte”, es un bombón que sólo apreciarán escasos paladares sobrevivientes.

Es lo que tiene el cine, ese refugio.